Santaria necesita resucitación cardiopulmonar tras vacunarse
Una sanitaria canadiense de 27 años se desmayó y sufrió múltiples convulsiones después de recibir la vacuna COVID-19 de Pfizer.
Una trabajadora de apoyo personal siente que el sistema de atención de la salud le "falló" después de que se pasara por alto sus alergias, dice, y le permitiera ponerse la vacuna COVID-19.
Deborah Tilli, de 27 años, dice que consideró la posibilidad de morir mientras sufría una reacción alérgica severa después de recibir la vacuna COVID-19. Dice que temía que sus dos hijas, de siete y cuatro años, se quedaran sin madre.
La vacuna desencadenó una grave reacción que, según ella, le causó desmayos, múltiples convulsiones, requirió resucitación cardiopulmonar y todavía siente los efectos casi una semana después.
"No estaba asustada, estaba emocionada. Me dije: 'Voy a ser una de las primeras trabajadoras de la salud de la ciudad en recibir la vacuna'", dijo.
El jueves, alrededor de las 11:15 a.m., se preparaba para vacunarse. Dijo que llenó los formularios de consentimiento y esperó a ser examinada.
"Tengo una alergia grave a los abejorros; la enfermera repasó mi expediente e incluso me interrogó al respecto"
Tilli dice que el paramédico revisó sus signos vitales y notó que su ritmo cardíaco era alto.
Recibió una inyección de Benadryl y pareció funcionar durante unos minutos. Pero los síntomas volvieron y empeoraron, dice. "El supervisor de los paramédicos estaba allí y sólo dijo: 'OK, vamos a darle el EpiPen'", dijo Tilli.
"En un minuto me desmayé".
Dave Thompson, superintendente del servicio paramédico local, confirmó a CBC News que Tilli fue llevada al hospital en condiciones estables.
Tilli dice que cuando despertó, le dijeron que sufrió convulsiones y que necesitó resucitación cardiopulmonar por un breve período.
En un momento se planteó que podría morir.(…)
https://www.cbc.ca/news/canada/hamilton/covid-19-vaccine-allergic-reaction-1.5856827