María Ferraz
Varias noticias recientes demuestran la presión de los liberales eclesiásticos hacia la fusión de la Iglesia Católica con las autoridades políticas y gubernamentales mundiales, en la consecución de unos objetivos comunes, con el pretexto de la crisis del coronavirus, de forma que nos quieren dirigir hacia la aceptación de una gobernanza mundial en lugar de defender que cada país solucione individualmente y con sus propias normas, las consecuencias de la pseudo pandemia.
1- Merkel y Francisco apuestan por la cohesión y la solidaridad para hacer frente al coronavirus. El punto central de su conversación telefónica fue la situación global humanitaria y política creada a raíz de la extensión del coronavirus, así como la relevancia en estos momentos de la cohesión europea y la solidaridad internacional
2- También es reciente la carta de un grupo de curas a los obispos europeos: "Unan sus voces y lideren un movimiento por la cooperación de los pueblos":
Queridos pastores, no basta con que el Papa clame una y otra vez para que Europa ponga en juego lo mejor de ella y responda con solidaridad, unidad y fortaleza a la crisis de la COVID-19, es necesario que todos los obispos europeos unan sus voces y lideren en el difícil momento actual un movimiento decidido y valiente por la cooperación entre todos los pueblos europeos. Esta necesaria unidad de nuestros pueblos será todavía más evangélica si, como siempre nos ha guiado en nuestras iglesias, queremos igualmente ser solidarios con los países más empobrecidos del mundo y para cuyas poblaciones el golpe de la pandemia será todavía más fuerte.
No se trata solo de la justa corresponsabilidad económica, por la que como cristianos deberíamos abogar sea cual sea nuestra nacionalidad, sino de tener una voz común que defienda la salida compartida de las gravísimas dificultades que van a sufrir los sectores más débiles de nuestras respectivas sociedades nacionales. Una voz de esperanza, pero también de llamada a la imprescindible apuesta por los valores de la fraternidad, el humanismo compasivo y la suma de nuestros potenciales creativos en el orden de la investigación y el trabajo social.
3. Dice el ex cura Leonardo Boff: Si no hacemos una “conversión ecológica radical”, en palabras del Papa Francisco, la Tierra viva podrá reaccionar y contraatacar con virus aún más violentos capaces de hacer desaparecer a la especie humana
Necesitamos un contrato social mundial, porque seguimos siendo rehenes del obsoleto soberanismo de cada país. (07.05.2020 Boff)
4. Juan José Omella, presidente de la Conf Episcop Española en un 'cameo' en un medio de comunicación, con el vicepresidente, Carlos Osoro, ambos han clamado por "un pacto entre todos los partidos políticos, estamentos sociales y económicos para salir" de la crisis provocada por esta pandemia. Omella además ha declarado lo mismo que Francisco hace unos días: "El ingreso mínimo vital hay que asegurarlo"
Noticias extractadas de Religión Digital
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