El veterano periodista de investigación Leo Hohmann descubrió una presentación de Ted Talk 2017 del Dr. Tal Zaks, director médico de Moderna Inc. en la que explica claramente y en lenguaje llano lo que hace la tecnología del ARNm en las vacunas.
Como el Dr. Zaks afirma claramente, están "hackeando el software de la vida", inyectando su propio código genético en los seres humanos.
Lo que estamos presenciando en esta nueva clase de "vacunas" es claramente la unión de la tecnología digital nacida de la era de la informática, con la biología y la medicina darwinianas.
En resumen, los nuevos tecnócratas de la medicina creen realmente que pueden mejorar el plan de diseño de los seres humanos, sustituyendo a Dios.
Esto no es una teoría de la conspiración, ya que son muy arrogantes y muy abiertos en cuanto a lo que sueñan conseguir.
Es ante todo un sistema de creencias, con muy poca o ninguna ciencia que respalde sus afirmaciones.
Bienvenidos al nuevo y valiente mundo post-COVID y a la agenda transhumanista. Los ingenieros de software de ayer, que ni siquiera pueden crear un sistema operativo de ordenador libre de virus, están ahora a cargo del "software de la vida" y trabajan con el cártel criminal Big Pharma. También financian y controlan lo que se emite en los medios de comunicación corporativos.
¿Qué podría salir mal?
El principal científico de Moderna: "Estamos pirateando el software de la vida".
Por Leo Hohmann
El Dr. Tal Zaks, director médico de Moderna Inc. explicó en una conferencia de TED 2017 cómo la vacuna de ARNm de la empresa fue diseñada.
En los últimos 30 años, dijo,
“hemos vivido esta revolución científica digital fenomenal, y hoy estoy aquí para decirles que estamos hackeando el software de la vida, y que está cambiando la forma en que pensamos en la prevención y el tratamiento de la enfermedad."
Continuó explicando que el cuerpo humano está formado por órganos y los órganos están formados por células.
“En cada célula, hay una cosa llamada ARN mensajero o ARNm, que transmite informaciones críticas del ADN de nuestros genes a la proteína, que es realmente la materia de la que estamos hechos. Estas son las informaciones críticas que determinan lo que hará la célula. Así que pensamos en ello como un sistema operativo.
Así que si pudieras cambiar esto, si pudieras introducir una línea de código, o cambiar una línea de código, resulta que esto tiene profundas implicaciones para todo, desde la gripe hasta el cáncer (aunque estos sujetos no están para curar sino para enfermar)
El 4 de febrero informé de que Moderna describe su nueva vacuna como "un sistema operativo informático", pero en ese momento no sabía que Zaks lo había mencionado hace tres años, desmintiendo totalmente la mentira de los medios de comunicación del poder establecido de que las vacunas de ARNm no cambian vuestro código genético.
No pudo ser más claro cuando dijo: "En realidad estamos hackeando el software de la vida".
Zaks señaló que en 2017, su empresa estaba trabajando en una vacuna que no actuaría como ninguna otra vacuna anterior jamás creada.
"Imagínese que en lugar de darle [al paciente] la proteína de un virus, le diéramos instrucciones sobre cómo fabricar la proteína, cómo el cuerpo puede fabricar su propia vacuna", dijo.
Zaks dijo que se necesitaron décadas para secuenciar el genoma humano, lo que se logró en 2003, "y ahora podemos hacerlo en una semana".
Después, en 2017, desveló los planes de su empresa para fabricar vacunas oncológicas individuales adaptadas a las necesidades de cada paciente con cáncer, "porque cada cáncer es diferente".
Curiosamente, uno de los efectos secundarios potencialmente más catastróficos de la vacuna de ARNm es su interacción con las células cancerosas. Según un estudio del Sloan Kettering Cancer Center de Nueva York, el ARNm tiende a inactivar las proteínas supresoras de tumores, lo que significa que puede favorecer el crecimiento de las células cancerosas.
Las inyecciones de Moderna y Pfizer son vacunas experimentales de ARNm. La FDA sólo ha concedido la Autorización de Uso de Emergencia [EUA] para estas inyecciones y permanecerán en fase de prueba hasta 2023, pero el gobierno, los medios de comunicación y las empresas las promocionan como si tuvieran garantizada su seguridad.
Este engaño sistémico será, en mi opinión, juzgado en el espejo retrovisor de la historia como uno de los actos más temerarios de traición médica jamás cometidos contra la raza humana.
Si esta supuesta vacuna hace que más personas contraigan cáncer, piensen en las posibilidades desde un punto de vista puramente comercial.
Según las predicciones del Dr. Zaks, que supervisó la creación de la vacuna que actualmente se administra a millones de personas en todo el mundo, las mismas grandes empresas farmacéuticas que podrían provocar cáncer a la gente con una vacuna podrían avanzar más adelante con otra vacuna que ofrezca la cura del cáncer. Si eres el director general de una megaempresa farmacéutica que responde a los accionistas de Wall Street que son los que obtienen los beneficios, ¡es una estrategia brillante!
Pero, ¿es ético desde el punto de vista médico? Es una pregunta que nadie hace.
Al escuchar al Dr. Zaks exponer los logros de su empresa en la creación de la vacuna de ARNm, no puedo evitar pensar en lo increíblemente arrogante que suena. Que los científicos piensen que pueden reescribir el código genético [sus palabras no son mías para todos aquellos que todavía no creen que estas vacunas de ARNm cambien el código genético sólo porque un "verificador de hechos" dice que no lo hacen], creyendo que pueden mejorar la composición genética de una persona dada por Dios es entrar en un territorio peligroso.
¿Quién puede decir que no corregirán un problema y crearán algo mucho peor?
Zaks concluyó su discurso de 2017 con las siguientes palabras.
"Si piensas en lo que estamos tratando de hacer. Hemos tomado informaciones y nuestra comprensión de esas informaciones y de cómo esas informaciones son transmitidas en una célula, y hemos tomado nuestra comprensión de la medicina y de cómo fabricar medicamentos, y estamos fusionando las dos cosas. La consideramos como una terapia de información".
Terapia de la información. Al igual que el código de los programas informáticos.
Estos científicos creen realmente que el cuerpo humano no es más que una máquina que puede ser hackeada y reorganizada según las instrucciones de ciertos programadores.
La misma naturaleza innovadora de esta investigación que entusiasma a algunos, es la que horroriza a otros.
La composición genética de una persona es, como dijo el Dr. Zak, "el software de la vida".
Si esto es cierto, ¿quién debería tener la autoridad máxima sobre el código del software genético de cada ser humano? Si realmente vivimos en una sociedad libre, ¿no sería lógico que quisiéramos tener un debate enérgico sobre cómo responder a esa pregunta?¿No debería ser la cuestión número que se debatiera en el Congreso y en los medios de comunicación?
En cambio, a nadie se le permite ni siquiera hacer estas preguntas sin ser amenazado, censurado, reprendido, deplorado. Los miembros de los medios de comunicación corporativos que se atreven a abordar el tema son despedidos.
En contra de lo que creen algunos científicos, no somos máquinas. Somos seres humanos con un cuerpo, un alma y libre albedrío. Cualquiera que intente imponer la aceptación de un tratamiento experimental de modificación genética infringe los códigos internacionales de Nuremberg, que exigen el consentimiento informado para cualquier tratamiento experimental.
Estimados lectores, no permitan que su empleador, su gobierno, su familia, sus amigos o cualquier otra persona les intimide o intente persuadirles de alguna manera para que acepten este tratamiento experimental si no lo desean.
Usted es su propia autoridad sanitaria, y punto. Si su empleador le amenaza con despedirle por rechazar esta inyección, póngase en contacto con un abogado.
Acerca del autor: Leo Hohmann es un veterano periodista de investigación. Su misión siempre ha sido informar sin miedo de las verdades sobre los grandes temas de nuestro tiempo y conectar los puntos, dondequiera que éstos puedan conducir. También trata de informar sobre los temas en su contexto histórico para que sus lectores puedan comprender el significado mayor de las noticias del día.
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