Misteriosa desaparición del presidente que se opuso a la tiranía Covid
Tanzania: La desaparición del presidente John Magufuli le convierte en el segundo jefe que pierde el poder por no seguir la dictadura Covid
John Magufuli, presidente de Tanzania, ha desaparecido. No se le ha visto en público desde hace varias semanas, y las especulaciones sobre dónde podría estar son numerosas.
La oposición ha acusado repetidamente al presidente de haber sido hospitalizado por "Covid19" en Kenia o en la India, aunque no hay pruebas de que sea así.
Para añadir algo de contexto, John Magufuli es uno de los jefes de Estado africanos que niegan la existencia de "Covid".
Pidió a su oficina de someter a tests cinco muestras sin etiquetar para su análisis -de cabra, aceite de motor, papaya, codorniz y jaca- y cuando cuatro de ellas dieron positivo y una "no concluyente", prohibió los tests de análisis y pidió que se investigara su origen y fabricación.
En el pasado, también ha cuestionado la seguridad y eficacia de las llamadas "vacunas contra el covid" y no ha permitido su uso en Tanzania.
En la prensa occidental, Magufuli ha sido retratado como "anti-ciencia" y "populista", pero no es justo sugerir que la salud de la población tanzana sea una prioridad baja para el presidente. De hecho, es lo contrario.
Tras ganar sus primeras elecciones en 2015, recortó drásticamente los sueldos del gobierno (incluido el suyo propio) para aumentar la financiación de los hospitales y la compra de medicamentos contra el sida. En 2015, canceló las celebraciones del Día de la Independencia y utilizó el dinero para lanzar una campaña contra el cólera. La salud ha sido una de las principales prioridades de su administración, y la esperanza de vida de los tanzanos ha aumentado cada año desde que asumió el poder.
La cobertura negativa del Presidente Magufuli es un fenómeno muy reciente. Al principio de su presidencia, incluso recibió artículos elogiosos de la prensa occidental y de los grupos de reflexión respaldados por Soros, que alababan sus reformas y lo calificaban de "ejemplo" para otras naciones africanas.
Todo eso cambió cuando declaró que Covid era un engaño.
Cuando fue reelegido en octubre de 2020, aparecieron las habituales acusaciones occidentales de "supresión de votantes" y "fraude electoral" en la prensa occidental, que anteriormente había informado de que su índice de popularidad alcanzaba el 96%.
La campaña anti-Magufuli ha cobrado impulso durante el nuevo año, con Mike Pompeo, el señor que dijo "mentimos, engañamos y robamos", (palabras de Pompeyo evocando su pasado en la CIA, N. del T.) que ha dictado sanciones contra responsables del gobierno tanzano en uno de sus últimos actos como Secretario de Estado. Las sanciones se debieron supuestamente a "irregularidades electorales", pero la realidad evidente es que se deben a la negativa de Tanzania a seguir la línea de Covid.
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