CREDITO SOCIAL I

 

¡TAN SIMPLE Y TAN DESCONOCIDO!

“Cuando gobiernan los traidores

el patriotismo es sedición”

Este sistema maravillosamente ideado por seres humanos dedicados a hacer el bien a familias, comunidades y naciones enteras, no es impuesto y aplicado por la perversidad de los bancos  que no quieren perder su poder y dominio a través del dinero – creado de la nada – sobre todos los seres humanos. 

Además, gracias a su poder financiero infinito anestesian las mentes de los jóvenes  con el dominio acientífico de universidades, medios de comunicación y opinión pública que dócilmente y con el dinero de por medio, venden como sagrado teorías carentes de rigor y silencian aviesamente a todos aquellos que pregonan por las verdades científicas.

¡Es penoso convivir con pensadores legítimos que son acallados, la mayoría, con la peor de las denigraciones: el silencio y la  indiferencia!

La maldita brecha no debe ser compensada por una deuda adicional – provoca guerras inútiles -, debe ser compensada con “expansión del poder adquisitivo a todos los ciudadanos como “dividendos adicionales” y a los comerciantes minoristas con “compensación de precios”.

Por el contrario los bancos, no permiten este mecanismo, pues ellos crean el dinero necesario como deuda, pero no crean la “verdadera riqueza de la comunidad”.

ES SIMPLEMENTE UNA FALSIFICACIÓN QUE EL CIUDADANO COMUN DESCONOCE

Esa brecha oculta entre ingresos efímeros y precios exultantes que hacen que los almacenes estén repletos de bienes, mientras en las calles sombrías deambulan sin ton ni son los seres humanos vacíos de cuerpo y alma.

Esa brecha es la clave, la perversión que debe ser revelada, y eliminada.

¿Cómo?

Sacándole la potestad que tienen los bancos de subsanar la brecha.

Esa brecha es la que fue conduciendo a la creación de impuestos, al endeudamiento de estados, comunidades y familias, y en los últimos tiempos de este escándalo, a la aparición de estas impurezas que salen a la luz como las alimañas de los charcos contaminados.

Ahí aparecen como por arte de magia, la renta básica universal, el crédito social – el otro, a la China – y otros, mientras los bancos y las grandes empresas, desde los balcones de la impunidad, se divierten con los padecimientos de la mayoría, sobrante y a la cuál procuran eliminar.

Cuando avancemos en el crédito social “a la China”, descubriremos los vericuetos más turbios y perversos de este mecanismo, al cual adhieren algunos “políticos democráticos” argentinos que ven esta trampa la manera de seguir manteniendo sus prebendas.

                                                            Roberto Franco

24.7.22